Estimado
señor Manio Manlio Escévola:
Tras la
muerte de su padre, he de decirle que el señor Tiberio va a condenarle a muerte.
Va a tirarle al río Tíber metido en un saco, puedo proponerle un plan para
escapar.El día que le condenen de muerte le meterán en un saco con determinados
animales. Espere usted a que uno de los animales rasgue la tela del saco y así
poder escapar. A continuación, invéntese una identidad y escape, puede hacerse
pasar por esclavo y venderse al mejor postor, pero no sin antes enviarle una
carta a su novia Claudia. En este largo recorrido van a pasar días incluso
meses y no podrá contar con mi ayuda ni con la de nadie. En la carta ya citada,
que le envié a su novia, puede decirle su identidad, dígale que está vivo, que
consiguió escapar, que se hace pasar por esclavo, y por supuesto, dígale que lo
compré a su dueño. Recuerde que usted solo es un esclavo y que no es Manio
Manlio Escévola. Ayúde a enseñarle a toda Roma que Manio Manlio Escévola no cometió el
crimen, hagamos justicia con su nombre, parece que “continúan los crímenes en
Roma”.
Atentamente:
Un hombre que quiere justicia.
Autor: Luis Fernández Pérez 1º ESO B
Editor: Jorge López Álvarez 4º ESO C
No hay comentarios:
Publicar un comentario